Panteísmo y liberación

on 4 de agosto de 2012

Mi paso por la tierra es apenas un entretenimiento, quizás por eso es que no me esfuerzo demasiado; no pongo toda la carne en el asador..., tal vez a sabiendas de que tampoco iba a alcanzar. Salgo del paso en este trámite a la espera de mi próximo y real destino: una eternidad en el Club de los Panza Arriba. No es que sea perezoso, es que no me creo esa pulsión del esfuerzo a mansalva que se empeñan en imponernos; luchar a brazo partido; pasar sueño y hambre para comprar un Jacuzzi en el que no tendremos tiempo de meternos, es cuando menos, estúpido. Somos piezas de un juego sin móvil aparente, salvo el de continuar la partida, al que los cuatro listos de siempre intentan dotar de contenido, arrastrando el ascua a su sardina. Como en el pasado el mundo era demasiado grande para la capacidad de desplazamiento de los dioses, las religiones llegaron hasta donde llegaron, y es sospechosamente curioso ver como el área de influencia de las distintas creencias, está delimitada por ríos, montañas o taigas, lo que no habla precisamente en favor de la omnipotencia de los distintos creadores. Un dios que creó un mundo en pocos días, y necesitó que se perfeccionaran las carabelas para llegar a las Américas, necesita de alguna explicación suplementaria a mi entender. 
Todas las civilizaciones han echado mano de estos vigilantes invisibles que son los dioses, que escudriñan la conducta de los fieles allí donde los guardianes del régimen no llegan, y guían en preceptos que siempre coinciden con las necesidades de las castas dominantes; o sea, que son un timo, que grabado a fuego en las mentes infantiles, tienen muchas posibilidades de perdurar durante siglos, avalando ilegitimidades.
Es la conciencia de la vulnerabilidad y la desprotección, la que empuja a los fieles del atajo intelectual a los diferentes dogmas; en mi caso: un panteísmo incomprometido, en el que dejar que pase el tiempo sin molestar a nadie, y evitando que lo hagan conmigo, es mi única forma de rezar.

4 comentarios:

PLINIA dijo...

Vaya despropósito !!!¿Club de los Panza Arriba?. Mucho habrá de cambiar sus hábitos terrenales para malograr su cuerpo apolíneo.

Resquicios dijo...

Curioso; nunca había pensado en las dificultades geográficas como prueba de la repartición de supremacías religiosas.
Respeto la diversidad religiosa y admiro aquellos que comulgan con ellas llevando una vida de cordialidad, respeto y vecindad con los demás, pero mi personalidad me lleva a justificar tales actitudes en principios filosóficos y éticos que no necesitan de entes superiores para su desarrollo. Las mafias de las grandes familias que dominan estas religiones, eso: es otra cosa. Me llama la atención cómo adultos que admiten la barbarie de la caza de brujas y lo “muy apropiado” de veredictos inquisitorios no sean capaces de extrapolar conclusiones sobre los tácitos beneficios sociales y económicos- de la purita edad media- de los que se benefician tales cúpulas. Predicar con el ejemplo es la mayor prueba de que creemos en lo que decimos . Cómo algo que me resulta tan claro no es compartido como vara de medida por muchos de los que me rodean? Cómo se puede respetar y creer al que predica “el dame y sufre por ganarte el cielo, que yo me gastaré lo tuyo en la Tierra?.
Educamos ensalzando la posesión como meta a conseguir en todos los aspectos de nuestra vida, quizá por ello Marianito- ya mayor-no puede comprender ni actuar de otra manera. Por desgracia son muchos los que entienden la máxima “trabaja para vivir y no vivas para trabajar” como el eslogan de la camiseta del verano. Y aunque me siento orgullosa de no llevar tal camiseta, admito que me falta mucho camino que recorrer al respecto (he de soltar aún cientos de peros que justifican mi seguir sobreviviendo entre absurdos).
Le robo su “fieles del atajo intelectual” ( no le pido permiso, que ya sabe que en este país no se estila)
Besos refrescantes

Verae dijo...

No sea tan modesto... Ud. participa, a su manera, en el juego. ¿Pero que digo? ¡Es el juego mismo; es el As escondido en la manga! ¡Ud. sí que sabe! y si no, vuelva a leer sus dos últimas líneas.

BaoT.

Xineiro dijo...

Me sorprende que alguien aún se moleste en pensar, analizar y escribir sobre religión, dios o fe. Más me sorprende aún, que seas tú quien lo haga, que siempre fuiste un ateo. ¿Será por los muchos cumpleaños celebrados y que cada vez faltan menos para tenerlos todos?
Hace poco leí una frase que decía más o menos así: "Asusta ver como el mundo parece estar dirigido por un loco, pero la realidad es mucho más terrible, no lo gobierna nadie, vamos a la deriva".
Creo que todos los seres humanos somos diferentes e irrepetibles, pero pienso que tú eres quizá el más diferente e irrepetible que yo conocí. Y no son esas tus únicas virtudes...

Salud, hermano.